La violencia laboral se refiere a cualquier tipo de comportamiento o acción que cause daño físico, emocional o psicológico a una persona en su lugar de trabajo, sin importar su puesto.
Puede manifestarse de diversas formas, como:
- Acoso verbal
- Intimidación
- Discriminación
- Agresión física o emocional, entre otras.
En este artículo vamos a detectar cada acción que sea considerada violencia laboral, pero sobre todo la manera correcta de actuar para erradicar esta práctica que, además de ser incidentes que no deben ocurrir, caen en delito.
Causas y factores de riesgo de violencia laboral
La violencia laboral puede tener graves consecuencias tanto para la salud física como mental de los trabajadores, así como para el ambiente laboral en general.
Las causas de la violencia laboral pueden ser diversas y estar influenciadas por múltiples factores:
- Falta de comunicación efectiva: La mala comunicación en el lugar de trabajo puede dar lugar a malentendidos, conflictos y tensiones que pueden desencadenar actos de violencia laboral.
- Ambiente laboral estresante: Altos niveles de estrés en el trabajo, presión excesiva, plazos ajustados y cargas de trabajo abrumadoras pueden contribuir a la aparición de comportamientos violentos.
- Conflictos interpersonales: Las diferencias de personalidad, opiniones, valores o estilos de trabajo entre colegas o entre empleados y supervisores pueden desencadenar conflictos que escalan hacia la violencia.
- Problemas de poder y jerarquía: Los abusos de poder, favoritismos, discriminación y comportamientos autoritarios en el lugar de trabajo pueden generar situaciones de violencia laboral.
- Falta de políticas y procedimientos claros: La ausencia de políticas efectivas para prevenir y abordar la violencia laboral puede permitir que estos comportamientos persistan o se intensifiquen.
- Factores personales: Problemas personales, como problemas de salud mental, adicciones o dificultades personales, pueden influir en la conducta de una persona para comportarse de manera violenta en el trabajo.
Es importante identificar y abordar estas causas para prevenir la violencia laboral y emitir medidas para promover un entorno laboral seguro y saludable para todos los empleados.
Mujer y el abuso laboral
Una de las prácticas más recurrentes dentro de la violencia laboral es contra la mujer, al hacerlas más vulnerables en acciones como:
- Acoso sexual: El acoso sexual en el lugar de trabajo es una forma de abuso laboral que afecta desproporcionadamente a las mujeres. Puede incluir comentarios inapropiados, insinuaciones sexuales o chantaje sexual.
- Discriminación de género: Las mujeres pueden enfrentar discriminación en forma de disparidad salarial, falta de oportunidades de ascenso, asignación desigual de tareas o proyectos, y trato injusto debido a su género.
- Abuso sexual: Algunas mujeres pueden ser objeto de intimidación, hostigamiento hasta llegar a ser víctima de abuso sexual a través de comportamientos no consensuados como tocamientos no deseados, violación, exhibicionismo, entre otros.
- Desigualdad de poder: La falta de equidad en la distribución del poder y la toma de decisiones en el trabajo puede exponer a las mujeres a situaciones desiguales por parte de superiores jerárquicos u otros colegas.
Es fundamental abordar el abuso laboral hacia las mujeres a través de políticas claras contra la discriminación y el acoso, programas de sensibilización y capacitación para todos los empleados, así como promover la igualdad de género en todos los niveles de la organización.
Métodos de acción para la prevención de la violencia laboral
Existen varios métodos de acción que las organizaciones pueden implementar para prevenir el riesgo de tener casos de violencia laboral en su empresa.
Por ejemplo, se podrían establecer políticas y procedimientos claros, sensibilización del tema a través de capacitaciones o talleres, fomentar una cultura organizacional positiva, promover la comunicación abierta, monitoreo y seguimiento a cada caso, y sobre todo contar con apoyo a las víctimas con psicólogos o médicos certificados disponibles en todo momento.
Es importante que las organizaciones establezcan políticas y protocolos claros para prevenir y abordar la violencia laboral, garantizando un entorno de trabajo seguro y saludable para todos los empleados, Mina es una excelente opción para contar con acceso directo a profesionales de la salud desde una sola App, contáctanos para agendar una demo completamente gratis.
Preguntas Frecuentes
¿Cómo puede la comunicación efectiva prevenir la violencia laboral?
La comunicación efectiva puede prevenir la violencia laboral al fomentar un ambiente de respeto y entendimiento mutuo. Establecer canales abiertos para el diálogo permite identificar y resolver conflictos antes de que escalen, así como promover la empatía entre compañeros.
¿Qué papel juega la capacitación en discriminación para evitar situaciones de violencia laboral?
La capacitación en discriminación es crucial ya que educa a los empleados sobre la diversidad y la inclusión, enseña a reconocer comportamientos discriminatorios y proporciona herramientas para intervenir de manera apropiada. Esto ayuda a crear una cultura laboral más equitativa y segura.
¿De qué manera pueden las políticas contra la discriminación reducir el riesgo de violencia laboral?
Las políticas claras contra la discriminación establecen un marco ético donde se definen las conductas inaceptables y se promueve un trato igualitario. Al tener consecuencias definidas para estas acciones, se disuade su ocurrencia, lo cual reduce el riesgo de incidentes violentos.
¿Cómo puede identificarse el riesgo de violencia laboral en el lugar de trabajo?
Identificar el riesgo implica realizar evaluaciones periódicas del clima laboral, atender señales como cambios repentinos en comportamiento o rendimiento, y mantenerse alerta ante posibles situaciones conflictivas. Herramientas como encuestas anónimas pueden ayudar a detectar problemas subyacentes.
¿Qué medidas preventivas pueden implementar las empresas para combatir la violencia laboral?
Las empresas deben desarrollar e implementar un plan integral que incluya formación continua en comunicación asertiva y manejo de conflictos, protocolos claros para reportar incidentes, apoyo psicológico profesional disponible para los trabajadores, fomento del trabajo en equipo y revisión constante de las dinámicas internas.
