Evaluación de riesgos: la base para gestionar la salud y seguridad laboral
Una evaluación de riesgos es un proceso que consiste en determinar las amenazas potenciales, evaluar la probabilidad de que ocurran y estimar el impacto que podrían tener en el objetivo definido.
Debe proporcionar toda la información necesaria para tomar decisiones adecuadas sobre cómo gestionar, mitigar o eliminar los riesgos identificados y minimizar las posibles consecuencias negativas. Lo ideal es que contenga los siguientes elementos:
- Método de evaluación utilizado
- Identificación de los riesgos
- Valoración de los riesgos
- Medidas preventivas y correctivas
- Seguimiento de implementación
Tipos de evaluaciones de riesgo
Existen diferentes tipos de evaluaciones de riesgos, y varían de acuerdo con el giro del negocio. A continuación, te compartimos las que consideramos que son útiles para cualquier pyme.
Evaluación de riesgos de salud y seguridad laboral: determina los riesgos como accidentes laborales, exposición a sustancias peligrosas, condiciones de trabajo inseguras, entre otros.
Evaluación de riesgos operativos: evalúa los riesgos asociados con las operaciones diarias como fallas de equipos, interrupciones en la cadena de suministro, problemas de cumplimiento normativo, entre otros.
Evaluación de riesgos financieros: identifica cualquier situación que pueda afectar la estabilidad económica de la empresa, como la fluctuación de precios, cambios en las tasas de interés, riesgos cambiarios, entre otros.
¿Cómo hacer la evaluación de riesgos en mi empresa?
1. Escoge un método de evaluación
Es muy importante que la persona o departamento que escoja el método -el cual debe ser adecuado para el entorno laboral, el tipo de industria y los riesgos particulares presentes- comprenda las necesidades y el contexto de la empresa. Además, debe considerar la complejidad del método y si la empresa cuenta con los recursos necesarios, como tiempo, conocimientos especializados y herramientas.
Puede incluir la observación directa, análisis de incidentes pasados, entrevistas con empleados, revisión de documentación, uso de listas de verificación específicas, etc.
2. Identifica los riesgos
Pueden estar relacionados con factores como el ambiente físico, las tareas realizadas, las herramientas utilizadas, los productos químicos presentes, entre otros. Puedes crear un listado específicos de riesgos de tu empresa, o bien, aquí te compartimos un listado genérico:
- Estrés laboral
- Posturas incómodas
- Caídas de altura
- Accidentes con maquinaria
- Acoso psicológico
- Equipos eléctricos defectuosos
- Químicos, gases, vapores o polvo peligroso
- Riesgos biológicos como virus, bacterias u hongos
- Exposición al calor o al frío excesivos
- Falta de apoyo social
3. Valora
Analiza y evalúa la probabilidad de que ocurran los riesgos identificados, así como el impacto que tendrían en la salud y seguridad de los trabajadores. Esta valoración se basa en criterios objetivos y subjetivos.
Si el daño aparece siempre o casi siempre, la probabilidad es alta.
Si el daño se produce en algunas ocasiones, la probabilidad es media.
Si existen pocas posibilidades de que el daño aparezca, la probabilidad es baja.
4. Prevén y corrige
Estas medidas pueden incluir cambios en los procesos de trabajo, adopción de equipos de protección personal (EPP), capacitación de los empleados, entre otros.
Si el riesgo es:
Trivial: No es necesario realizar una acción específica.
Tolerable: No se necesita mejorar las acciones preventivas, pero si considerar mejoras.
Moderado: Se deben hacer esfuerzos para reducir el riesgo.
Importante: No debe comenzarse el trabajo hasta que se haya disminuido el riesgo.
Intolerable: El trabajo no debe empezar o continuar hasta que se haya reducido el riesgo.
5. Brinda un seguimiento
Lleva a cabo inspecciones regulares, monitoreo de indicadores de salud y seguridad, y revisiones de procesos para garantizar el control adecuado.
La planificación y seguimiento puede registrarse en el documento de la evaluación o en un documento aparte. Te recomendamos registrar la fecha de inicio prevista, el responsable de ejecución y fecha de finalización.
Reduce los riesgos psicosociales en tu equipo
Como lo hemos mencionado anteriormente, el estrés laboral, el acoso psicológico y demás problemas de salud mental requieren tomar acción inmediata, y en el mejor de los casos, prevenirlos.
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